Foto de apertura: Estadio Olímpico. © visitberlin, Philip Koschel
El diseño arquitectónico del estadio es impresionante por sí mismo. Sus columnas imponentes, la torre de observación y la mezcla de elementos clásicos y modernos lo convierten en una obra maestra visual. Aquí se jugará España el cobre en la Eurocopa 2024. La cita la tiene a las 6 de la tarde del 15 de junio con la temible Croacia de Modric. Pero hasta la hora del partido, y los días despues, los aficionados tienen todo un universo berlines para disfrutar de uno de los destinos mas peculiares de Europa. Aquí le dejamos 5 propuestas.
[1] Ruta ciclista Wannsee-Babelsberg
Berlín invita a pillar una dos ruedas. Existen decenas de rutas por itinerarios a través de la naturaleza llenos de historia, como la ruta que recorre el antiguo emplazamiento del muro de Berlín. Pero nosotros recomendamos la Wannsee-Babelsberg, la verdadera ruta de los lagos que recorre la orilla del gran Wannsee y el Havel y, de vuelta, se pasa por el Griebnitzsee y el Stölpchensee Además, con este itinerario se pueden visitar los palacios y parques de Potsdam y Berlín, declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Y si el calor aprieta puede hacer un descanso y darse un baño.
Ruta ciclista muro de Berlín
Súbete a tu bicicleta en Bernauer Straße y sigue los 150 kilómetros del antiguo Muro de Berlín y disfruta de toda su historia. La antigua carretera de patrulla está asfaltada en su mayor parte y aún se encuentra en buenas condiciones.
[2] Berlín and Beer
Después de la ruta en bici una cerveza entra como la gloria. En el verano berlinés las terracitas surgen como setas, en cualquier parque o a lo largo de las orillas del río Spree. Uno de los más populares es Badeschiff, sobre un muelle flotante en el citado río. Además de tomarse una helada rubia, se puede disfrutar de la música de Djs internacionales, y si el calor aprieta, y en Berlín puede estrangular, uno se puede remojar en la piscina flotante.
Badeschiff
El Badeschiff es uno de los chiringuitos más extraordinarios de Berlín. La gran piscina flota en el río Spree frente al Arena Berlin. Una pasarela de madera con hamacas conecta la barcaza que contiene la piscina con la orilla del río, donde los huéspedes pueden disfrutar del sol sobre la arena fina. El bar ofrece una variedad de cervezas y cócteles de verano y barbacoa para relajarse despues de un día intenso.
[3] Perderse en la Reserva de la Biosfera Schorfheide-Chorin
Con un tamaño de 90.000 campos de fútbol, Schorfheide es una de las zonas forestales cerradas más grandes de Alemania. Cientos de kilómetros cuadrados de bosques, algunos de los cuales incluso son Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, son un lugar fantástico para darse un baño de naturaleza. Schorfheide se encuentra al noreste de Berlín. Aquí se alternan bosques densos y vastos paisajes abiertos, valles profundos y cadenas montañosas peculiares.
Parque de Vida Silvestre
Se pueden encontrar ejemplares de águila manchada, grullas, castores, ciervos rojos, lobos, alces o nutrias en vastos bosques de pinos, robles de Hute y extensos hayedos. Que se pueden disfrutar con visitas guiadas.
[4] La campiña de Brandenburgo
Si te parece poca la naturaleza de la Reserva de la Biosfera Schorfheide-Chorin, puedes enfilar hacia la campiña de Brandenburgo, que cuenta con más de 2000 km de senderos señalizados por los que discurrir a través de las orillas de lagos, bosques de pinos y hayas donde habitan cisnes, garzas o el Águila de cola blanca, la mayor ave de Europa. Y se pueden hacer escuchando los conciertos homónimos del señor Juan Sebastían Arroyo
Ruta en Uckermark-Barnimding
Ruta de 29 kilómetros discurre por el bosque de hayas de Grumsin, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, y se puede llegar fácilmente en tren desde Berlín.
[5] En el puente de los Espías
Y una vez en Berlín hay que ir a los escenarios donde las peliculas rodaron hechos verídicos de la Guerra Fria en los escenarios reales, como por ejemplo el Puente Glienicker. Glienicker Brücke es un puente sobre el río Havel que conecta el distrito de Wannsee en el oeste de Berlín con Potsdam, la capital del estado de Brandeburgo. Sirvió varias veces como lugar para intercambiar agentes occidentales por espias soviéticos capturados. Hasta 1989, el puente estaba cerrado a los civiles. Y es aquí donde se rodó la película de Steven Spielberg “El puente de los espías – El negociador” en 2015 sobre la historia del intercambio entre el piloto y militar Francis Gary Powers ( EE.UU.) y el condenado por pertenencia a la organización KGB, Rudolf Abel (URSS) en 1962.