Kyle Richardson tiene claro de donde nace su pasión por la música “Mientras estaba en la Universidad en 2014, recibí mi primera muestra de percusión brasileña a través de uno de mis profesores, Carl Dixon. Él enseña batería y es un mago de la percusión brasileña.”
De hecho, el término “batería” es el mismo que en portugués. En Brasil, la palabra también se utiliza para un tipo de banda de samba brasileña, la banda de percusión o sección rítmica de una escuela de samba.
“Rápidamente me aficioné a la música samba, y las complejidades rítmicas que existían en ella me fascinaron. Tocar la batería me recordaba a estar en la banda de música del instituto, pero menos robótico y más conmovedor. A diferencia de otras músicas más tradicionales, clásicas y estoicas, la samba encarna el espíritu del movimiento y el ritmo. El término para este movimiento es Ginga, y se refiere a cómo se mueve un bailarín o músico. Fue así como empecé a asociar esta conexión con el movimiento de correr. La música brasileña incita al movimiento en los oyentes, del mismo modo que correr me evoca al movimiento del mundo natural” explica Richardson.
"Mí mente empezó a preguntarse qué pasaría si aplicara la gracia y el aplomo de mi formación musical, al arte de correr por la montaña, adoptando el movimiento de la danza y llevándolo al trail running"
Kyle Richardson Tuit
Poco después, Odin Aguiar contactó con Richardson a través de Instagram. Odin, runner y músico afincado en el colorido barrio de Santa Teresa, en Río de Janeiro (Brasil), quedó inmediatamente cautivado por el concepto de Tempo.
“Me aplaudía por la película Tempo y me explicaba cómo le resonaba la conexión entre correr y la música. Le respondí agradeciéndole sus palabras. Terminé nuestra conversación diciendo que tenía el sueño de visitar algún día Brasil y utilizar la plataforma Tempo para compartir la historia y la relación de la samba y el running con un local” contestó Richardson.
De esta forma, Tempo: Movements in Mountains fue la plataforma de lanzamiento de algo extraordinario. Una idea que los llevó a Brasil, donde crearon junto a Odin la secuela de la película original. Sólo que esta vez bajo el título “Movements in Jungle”.
“Parte de la alegría y la emoción de explorar la conexión entre el ritmo y el running es poder compartirlo con personas con intereses similares. Compartir mi pasión con Odin en Brasil fue un sueño hecho realidad. Tocar música y correr con Odin fue para mí la posibilidad de cerrar un círculo y un recuerdo excepcional que no olvidaré nunca. Fue como la culminación de muchos de mis entrenamientos y actividades al unísono, rodeado de mis mejores amigos y con todo el apoyo de Black Diamond a mis espaldas.” Reconoce Richardson.
El resultado es un cortometraje inspirador, con una combinación sublime de música, naturaleza y pasión por el trail running disponible en el canal de youtube de Black Diamond